La Alianza Cristiana y Misionera, desde sus comienzos bajo el liderazgo del reverendo Alberto Benjamín Simpson, enfocó su ministerio en servir y alcanzar comunidades de inmigrantes en Nueva York. El joven pastor de 36 años, a su vez un inmigrante de la Isla Prince Edward en Canadá, fue llamado en 1879 a pastorear la Iglesia Presbiteriana de la Calle Trece en esa ciudad. Es allí donde percibió la clara dirección de Dios para enfocar su ministerio hacia los grupos marginados, descuidados y no alcanzados en la ciudad. Dios prosperó sus esfuerzos evangelísticos entre los inmigrantes italianos a tal punto que no le quedó otro remedio que renunciar a su pastorado en la iglesia presbiteriana, para salir a fundar lo que llegó a conocerse como el Tabernáculo del Evangelio (Gospel Tabernacle). Entonces, 130 años más tarde, el movimiento misionero que él fundó en 1887 todavía está enfocado en alcanzar las nuevas olas de inmigrantes y refugiados que a menudo llegan a los países en los que La Alianza tiene ministerio, incluyendo Estados Unidos y Puerto Rico. Hoy La Alianza cuenta con unas 2,000 iglesias en Estados Unidos, Puerto Rico y las Bahamas, y con una membresía inclusiva que sobrepasa las 500,000 personas que adoran a Dios en 37 idiomas y dialectos. Además de esto, La Alianza tiene presencia y obra misionera en más de 70 países alrededor del mundo.